viernes, junio 25, 2010
|
Dudo que cualquier persona que navegue el Internet tenga dificultad en encontrar cualquier tipo de pornografía que se pueda imaginar, pero las cosas ahora se tornaron aun mas fácil, pues la ICANN (la entidad responsable de estos asuntos) acaba de aprobar el domino de alto nivel .XXX para uso universal.
Es decir, así como existen páginas al estilo blahblah.com, ahora habrán páginas al estilo blahblah.xxx haciendo de este dominio .xxx un lugar exclusivo para material explícito para adultos. Muchos creen que por fin podremos controlar la pornografía que llega a nuestros menores, pero en realidad lo que acaba de ocurrir es lo contrario, ya que aparte de la pornografía que existe en todo el Internet en todo tipo de dominios, ahora todos saben que cualquier combinación de palabras que uno invente y que termine en un dominio .xxx te llevará a ver material para adultos directamente. Noten que no estoy diciendo que esto sea malo, sino que no se ilusionen pensando que la industria pornográfica será regulada con esta medida, ya que lo que ocurre es todo lo contrario: Una vía mas para expandir uno de los negocios mas antiguos y prósperos de la humanidad... Finalmente, noten que esto no es un proceso reciente, pues ya en el 2005 les hablé de que en el futuro veríamos los dominios .xxx en Internet. Fuente de la noticia autor: josé elías |
29 comentarios |
Curiosidades , Internet , Negocios |
Comentarios
Añadir Comentario |
"No jugamos a ser dioses, la raza humana tiene que desarrollar este tipo de cosas, esta dentro de su misma evolución. Hay quienes se oponen, y sin duda creo que el avance de estas técnicas puede desarrollar cosas malas pero a la vez son necesarias ya que este planeta no es eterno, algún dia tendremos que mudarnos a otros mundos utilizando esta tecnología para poder crearnos en base a las necesidades del ambiente."
en camino a la singularidad...
©2005-2025 josé c. elías
todos los derechos reservados
como compartir los artículos de eliax
Seguir a @eliax
Sólo veo desventajas, ahora gobiernos censuradores y empresas restrictivas, como una muy de moda últimamente, podrán ahora en un acto de paternalismo repugnante, controlar mas fácilmente que es lo que pueden o no ver los usuarios mediante un proceso trivial de filtrado de dominio.