lunes, mayo 25, 2009
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He aquí uno de esos momentos que debería hacer que muchos se sienten a pensar un par de minutos sobre lo rápido que avanza la tecnología.
La portada del último ejemplar de la prestigiosa revista The New Yorker fue pintada de manera digital al 100% dentro de un iPhone con una aplicación llamada Brushes ("Pinceles"), por el artista Jorge Colombo. Brushes es una aplicación la cual poseo desde hace un tiempo y está bastante genial, pero no es un reemplazado ni de Photoshop de ni Painter, sino una sencilla herramienta para pintar con tu iPhone. Opinión: Sin embargo, lo importante de esto es que es una señal de los tiempos... Por varios años acá en eliax he hablado sobre un tiempo en donde los dispositivos móviles poco a poco reemplazarán a nuestras laptops y PCs de escritorio, y aunque ciertamente falta un poco mas de tiempo para que ese escenario se haga realidad, este acto de la revista The New Yorker es ciertamente una señal simbólica de que estamos en los inicios de ese gran cambio. Hoy día gracias a la revolución que ocasionó el iPhone (y que estamos viviendo con otros dispositivos similares como los celulares Android con tecnología de Google, o el próximo Palm Pre), mas y mas personas se encuentran haciendo gran parte no solo de su entretenimiento y búsqueda de información en estos dispositivos, sino que incluso sus funciones laborales. Ya existen millares de corredores en la bolsa de valores que utilizan el iPhone como la herramienta principal para hacer negocios. Así mismo existen decenas de miles de vendedores de bienes raíces que utilizan estos dispositivos para mostrar sus propiedades a clientes, o tomar fotos o videos de los lugares a venderse o rentarse. Similarmente está creciendo exponencialmente la cantidad de doctores en clínicas y hospitales que están utilizando estos dispositivos como su manera principal de llevar rastro de sus pacientes. Lo mismo se puede decir de cientos de miles de pequeñas y medianas empresas, de aplicaciones de Puntos De Venta (POS), pago electrónico, mensajería instantánea, correo electrónico, gestión de sistemas de transporte, gestión aduanal, gestión de inventarios, consultas de ingeniería, acceso remoto a redes corporativas, banca personal, y un sinnúmero mas de actividades de nuestra vida diaria. Y ahora, como pueden ver en este ejemplo de hoy, inclusive ya tenemos al menos un ejemplo de alguien que ha logrado llevar su arte a una prestigiosa publicación, y lo mismo está ocurriendo incluso en renglones como la música, poesía, fotografía, e incluso cine. Nota sobre el video que incluye esta noticia: Los pasos fueron captados con esta aplicación que puedes instalar en tu Mac OS X y está diseñada para interactuar con Brushes, ya que los dibujos que componen la imagen son en realidad vectores con parámetros en una secuencia determinada. La aplicación que graba los pasos no lo hace en tiempo real, por lo que aparenta que el dibujo se hace rápidamente, lo cual no es el caso, ya que esta aplicación solo graba los pasos finales que llevaron a la obra, y no los pasos de "undo" ("deshacer lo último") ni el tiempo pensando entre un trazo y otro. Tampoco muestra cuando el artista amplifica la pantalla para pintar con mas detalle (ya que como se imaginarán, no es fácil pintar pequeños detalles con nuestros grandes dedos en la relativamente pequeña pantalla del iPhone). Y como siempre, pueden leer mas de mis opiniones y análisis en la sección bajo ese nombre a la derecha de la página principal de eliax. Fuente de la noticia en The New Yorker Página oficial de The New Yorker Otros trabajos de Jorge Colombo (varios hechos con su iPhone) Brushes para el iPhone (disponible en el App Store por menos de US$5 dólares) A continuación, un video mostrando paso a paso cómo el artista pintó esto en el iPhone (al inicio es posible que The New Yorker les muestre un breve anuncio)... autor: josé elías |
2 comentarios |
Opinión / Análisis |
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"Despues de casi dos meses de haber empezado a leer el libro, motivado por este post, ayer lo complete. Además de Eliax, debo agradecer al ipad porque de verdad que el hecho de no ver físicamente al libro ayuda para su lectura, especialmente con éste libro, el cual a José Elias se le olvidó mencionar que esta entre las 10 novelas más largas de la hitoria de la literatura, o sea, ¡ES LARGO!, además de extenso (imaginense que un personje central del libro toma más de 1,500 páginas para aparecer), es denso, instrospectivo y sobre todo bastante filosófico. Dicho esto, debo simplemente afirmar que la huella de este libro me acompañará por el resto de mis días...sinceramente, hay libros que marcan, este es uno de esos y no se cómo no lo leí antes...
El libro es una apología al individualismo, con el la autora expone en detalle su filosofía (objetivismo) ante un sinúmero de situaciones, filosofía ésta que ya venía fraguandose desde El Manantial.
El libro es una verdadera joya y puedo comprender por que fue su última novela: ¡¿Cómo escribir algo despues de eso?! Creo que este libro es el ejemplo perfecto de lo que es una novela filosófica.
Para un ejemplo, miren su visión de lo espiritual:
"Un místico es un hombre que rindió su mente en su primer encuentro con las mentes de otros. En algún lejano momento de su infancia, cuando su propio entendimiento de la realidad chocó con las afirmaciones de otros, con las órdenes arbitrarias y exigencias contradictorias de otros, él cedió a un temor a la independencia, tan cobarde que acabó renunciando a su facultad racional. En la encrucijada de la elección entre “Yo sé” y “Ellos dicen”, eligió la autoridad de otros, eligió someterse antes que entender, creer en vez de pensar. Fe en lo sobrenatural empieza como fe en la superioridad de otros. Su rendición tomó la forma de una emoción: que él debe esconder su falta de entendimiento, que otros poseen algún tipo de conocimiento misterioso del que sólo él carece (...)""
El libro es una apología al individualismo, con el la autora expone en detalle su filosofía (objetivismo) ante un sinúmero de situaciones, filosofía ésta que ya venía fraguandose desde El Manantial.
El libro es una verdadera joya y puedo comprender por que fue su última novela: ¡¿Cómo escribir algo despues de eso?! Creo que este libro es el ejemplo perfecto de lo que es una novela filosófica.
Para un ejemplo, miren su visión de lo espiritual:
"Un místico es un hombre que rindió su mente en su primer encuentro con las mentes de otros. En algún lejano momento de su infancia, cuando su propio entendimiento de la realidad chocó con las afirmaciones de otros, con las órdenes arbitrarias y exigencias contradictorias de otros, él cedió a un temor a la independencia, tan cobarde que acabó renunciando a su facultad racional. En la encrucijada de la elección entre “Yo sé” y “Ellos dicen”, eligió la autoridad de otros, eligió someterse antes que entender, creer en vez de pensar. Fe en lo sobrenatural empieza como fe en la superioridad de otros. Su rendición tomó la forma de una emoción: que él debe esconder su falta de entendimiento, que otros poseen algún tipo de conocimiento misterioso del que sólo él carece (...)""
en camino a la singularidad...
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Pues si señor me pusiste a pensar 2 minutos ya que soy artista gráfico.